Teoría de Jung, Psicología Analítica

 Teoría de Jung, Psicología Analítica 

Carl Gustav Jung nació en Suiza en 1875, dio clases en la universidad de Zurich, desarrolló una técnica de asociación de palabras para descubrir los complejos emocionales de sus pacientes. Exaltaba el trabajo de Freud sobre el psicoanálisis lo apoyó aun cuando el psicoanálisis era controvertido. En su viaje a los Estados Unidos, tuvieron suficiente tiempo para conversar y discutir sobre el psicoanálisis, lo que los llevó a tener diferencias.

La psique y el Sí mismo: la personalidad como un todo

Jung por lo general se refiere a la personalidad como psique a lo que le atribuye la integración de todos los aspectos de la personalidad en función de la integración del en Sí mismo. Incluye todas las cualidades y potencialidades de la persona. Ya sea que se hayan vuelto o no aparentes o conscientes en una fase de la vida en particular.

El consciente y el inconsciente coexisten en los individuos. Jung describió esta relación como una compensación. El inconsciente compensa parcialmente por el consciente, haciendo énfasis en los aspectos que han sido olvidados por la consciencia.

Individuación

El es proceso de restauración del psique del adulto en su edad temprana, lo que empieza como un todo unificado pero inconsciente, en ese proceso varios aspectos del psique llegan al desarrollo de la consciencia mientras otras áreas permanecen inconscientes. por lo que es inevitable un desequilibrio en la totalidad original. Este se restaura durante la adultez en la edad media, los potenciales inconscientes son reintegrados al en Si mimso, a este proceso Jung le llamó individualización el cual consiste en mover el centro del poder de la personalidad del yo a algún punto intermedio entre el yo y el inconsciente. la función trascendente aspecto de la personalidad que integra diversos aspectos dentro un todo unificado.

Yo

Aspecto de la personalidad que es principalmente consciente funge como el “guardián de la consciencia”. Esencial para la identidad personal, es el centro de la voluntad debido a las mismas limitaciones de la consciencia. El yo es parte, pero no el centro de la personalidad.

Al ponerla al centro de la personalidad probablemente es la manera más común de estar en desequilibrio durante la primera mitad de la vida, la identificación de la experiencia e intenciones conscientes a lo que denominó inflación del yo.

Persona

Aspecto de la personalidad que se adapta al mundo, se moldea por las reacciones de las demás personas lo que se convierte en la autoimagen o persona. tiene cambios a lo largo de la vida, generalmente se establecen en la adultez. Otros dos elementos psíquicos, la sombra y el ánima.

Sombra

Son los aspectos de la psique rechazados de la conciencia por el yo, son inconsciente con el autoconcepto, impulsos sexuales y agresivos que son inaceptables siendo estas las características de la sombra se interponen entre la consciencia y el inconsciente produciendo la experiencia del conflicto moral.

Proyección de la sombra

En sus estudios Jung considera que la sombra en los sueños tiene el mismo sexo que el soñador como una figura reprimida del mismo consciente por lo que si el hombre se visualiza como orgulloso, se proyecta en su sombra como un hombre. da paso a un prejuicio racial.

Ánima y ánimus

El rechazo a las cualidades negativas o inconscientes con su persona, además de aquellas que no son compatibles con su propia identidad, siendo hombre o mujer. El ánima la represión de desarrollo o falta de desarrollo de las cualidades femeninas, por su parte el ánimus que es la represión o falta de desarrollo de las cualidades masculinas. Jung se refirió al ánima como “la mujer interior del hombre”. El ánimus es “el hombre interior de una mujer”.

Proyección del ánima o ánimus

Estos se proyectan sobre el sexo opuesto, lo que desencadenan varias emociones como: el temor, el rechazo y anhelo desde la propia actitud ya sea del ánima o ánimus, generalmente actúa como rechazo por ejemplo la feminidad interna en el hombre. también en un estado de aceptación o menosprecio a una mujer por su sentimentalismo, rechaza en sí mismo su propio sentimentalismo no reconocido.

Genética y el inconsciente colectivo

Una de las ideas más controvertidas de Jung es que el inconsciente colectivo sigue las leyes de la herencia genética. Existen diferentes variaciones del inconsciente colectivo, noción del “inconsciente racial”.

La sombra y el ánima o ánimus como arquetipos

El contenido de la sombra y del ánima o ánimus, con los conflictos emocionales o complejos asociados, es parte del inconsciente personal. El contenido de la sombra sería diferente si una persona fuera criada con diferentes mensajes acerca de lo que está bien y lo que está mal. La predisposición a desarrollar una sombra y un ánima o ánimus es colectiva.

Otros arquetipos

Debido a que la sombra y el ánima o ánimus están más cerca de la consciencia, son los arquetipos con los efectos sobre la experiencia. Los demás arquetipos se encuentran en lo profundo del inconsciente colectivo e influyen en la estructura de la personalidad, experiencia consciente con menos frecuencia. Cuando lo hacen, se sienten más ajenos. Los arquetipos pueden ser experimentados individualmente en los sueños o en proyecciones sobre la demás gente. Además, son reflejados en las historias y los mitos.

Psicosis: Los peligros del inconsciente colectivo

Las alucinaciones psicóticas y los delirios como expresiones directas del inconsciente colectivo. sobrepasa la individualidad de la persona, la experiencia directa puede ser peligrosa, pero el inconsciente puede ser enfocado con cuidado con la ayuda de símbolos y mitos.

Mitos y religión

Quizá son los más importantes porque proporcionan una guía valiosa para la vida y el desarrollo. Un interés creciente en los dioses, por ejemplo, el debate de la creación. Los mitos proporcionan los medios para tocar lo más profundo, los niveles creativos del potencial humano.

Mitos modernos

Debido a los avances científicos, los nuevos mitos guían, a través de los nuevos retos en la actualidad, Es un proceso activo y vital en la cultura humana, según Jung cuando se pierde la capacidad de mitificar. pierden contacto con las fuerzas creativas de su ser.

Terapia

La terapia junguiana en gran parte se enfoca en los sueños y el material simbólico, el enfrentamiento cara a cara entre el paciente y el terapeuta. Trata al inconsciente como un aliado y no como enemigo, para su creatividad para la recuperación e integradas con el resto de la psique.

Sueños

Considera que los sueños son productos del inconsciente, en efecto los sueños en los pacientes en su mayoría son declaraciones del inconsciente, también reflejan una enfermedad física, varios sueños reflejan los complejos emocionales, no resueltos.  La interpretación de los sueños involucra tres etapas. Primero, el soñador recuerda el sueño, relata todo en detalle. Segundo, en la amplificación del sueño, el soñador elabora las imágenes del sueño, describe asociaciones de la gente y los símbolos incluidos en el sueño (Mattoon, 1978).

Los junguianos con frecuencia agregan una tercera etapa, la imaginación activa, en la cual el soñador continúa con la imaginería del sueño en la fantasía diurna, agregando nuevos episodios o de otra forma continua el trabajo simbólico hacia el crecimiento personal que empezó en el sueño.

Otras técnicas de terapia simbólica

Otras técnicas alientan el diálogo con el inconsciente, como la terapia del juego que permiten la expresión de las imágenes desde el inconsciente. También los mitos pueden reflejar significados de los comportamientos problemáticos de los pacientes.

La vida simbólica

La atención a los símbolos no debe terminar con la conclusión de la terapia. Una mayor exploración simbólica a través de talleres estructurados (por ejemplo, Progoff, 1975) puede ser útil. En su conclusión más deseable, la terapia junguiana prepara a los individuos para crear nuevas formas simbólicas. Participan activamente en el devenir de la tarea humana de tocar las energías creativas del inconsciente; por tanto, contribuyen a un destino humano en evolución. Quien ha terminado con éxito un análisis junguiano debe llevar una “vida simbólica”.